El mantenimiento fotovoltaico es importante para prolongar la vida del sistema y mantenerla en su estado óptimo por mas tiempo. El mantenimiento, en ocasiones, es una actividad de alto riesgo. Por esta razón, todo profesional debe estar capacitado para llevar a cabo un correcto mantenimiento.
Un mantenimiento periódico asegura la rentabilidad y funcionamiento del sistema. Además, puede reducir reparaciones y gastos innecesarios. Así como, garantizar que los equipos se encuentren de acuerdo a normas vigentes y, no perder garantías de la instalación.
Riesgos por falta de mantenimiento fotovoltaico
Los mantenimientos en sistemas fotovoltaicos son sencillos. Sin embargo, omitirlos, traerán consecuencias negativas, desde cambiar un panel, un inversor, hasta el sistema completo.
Te mostramos algunos de los riesgos por omitir el mantenimiento.
Puntos calientes
Los puntos calientes, o también llamados Hot Spot, son áreas del panel con temperaturas elevadas. Uno de los motivos de su aparición es por el sombreado parcial. El sombreado puede ocurrir por árboles, cableado, incluso, por suciedad en el panel.
¿Que ocasionan los Hot Spot?
1. Disminuir la generación de energía.
Una célula solar con sombra disminuye el flujo de energía en el panel. Así mismo, puede afectar todo el módulo. “Una cadena es tan fuerte como el eslabón mas débil”.
2. Degradación del módulo.
Un Hot Spot o punto caliente, presenta una resistencia al flujo de corriente. Es decir, las pérdidas de energía ocasionadas por la resistencia, se disipan en forma de calor. Lo que se traduce a, una aceleración de degradación de los materiales.
3. Incendio
Las altas temperaturas en la células solares, ocasionadas por un Hot Spot, pueden provocar un incendio. No solo quemar un panel, sino tambien todo el sistema.
Filtro de aire sucio.
El mantenimiento en inversores consiste en limpiar los filtros de los ventiladores. Estos filtros ayudan al enfriamiento del inversor. Sin mantenimiento, los filtros se obstruyen de polvo. Esto aumenta el calentamiento del inversor y reduce su eficiencia. Además de evitar un óptimo funcionamiento, podría causar un daño irreparable.
Tipos de mantenimiento fotovoltaico
Los tipos de mantenimientos se pueden dividir en 3 principales.
Mantenimiento fotovoltaico preventivo
El mantenimiento preventivo busca evitar surgimiento de averías, mediante una revisión anticipada. De esta manera disminuyen las reparaciones y, a su vez, los gastos.
En sistemas fotovoltaicos, algunas de las actividades son:
- Limpieza de paneles: Se el desprende polvo y suciedad. Es recomendable hacerlo durante las primeras horas del día, cuando la altura del sol es baja. Así, se evita el choque térmico debido a la diferencia de temperatura entre el panel y el agua.
- Termografía: Consiste en la revisión de posibles puntos calientes con una cámara termográfica. Esto, para diagnosticar daños en los módulos. Los puntos calientes en los paneles pueden disminuir la eficiencia del módulo.
Mantenimiento correctivo
Se utiliza cuando ocurre una avería y/o una sustitución de partes, teniendo como objetivo la reparación del sistema fotovoltaico.
Entre las principales fallas se encuentran:
- Par galvánico.
Sucede al poner en contacto dos metales de distinta composición, combinándolo con un ambiente húmedo. Esto afecta la estructura, poniendo en riesgo la instalación. Para prevenirlo, se coloca un aislante entre cada metal como mantenimiento preventivo.
- Vidrio del panel roto.
En ocasiones, el vidrio del panel puede presentar impurezas. Esto puede afectar las células del módulo. Así mismo, es posible que al vidrio le pueda impactar una piedra, o algún otro objeto que pueda quebrar el cristal. Como medida de mantenimiento correctivo, el módulo se tendría que cambiar.
Mantenimiento predictivo
Es el mantenimiento fotovoltaico que monitorea el rendimiento y el estado del equipo durante el funcionamiento normal para reducir la probabilidad de fallas.
- Monitoreo
Monitorear la generación fotovoltaica, es parte del mantenimiento predictivo del sistema. El monitoreo remoto periódico puede detectar posibles fallos en la generación, necesidad de limpieza de módulos o daños en las celdas fotovoltaicas.
